La Industria Nacional de Autopartes (INA) advirtió que un eventual incremento de aranceles al acero y aluminio tendría un impacto inflacionario en el consumidor y efectos negativos en la competitividad del sector en todo Norteamérica.
El director del organismo, Gabriel Padilla, dijo que entre los principales impactos de los aranceles será un incremento estimado de tres mil dólares en el precio promedio de los automòviles en Estados Unidos.
Las ventas de vehículos en EU podrían caer en un millón de unidades, además de que se reducirían las importaciones estadounidenses en un 15 por ciento.
A ello se suma el impacto en la competitividad y estabilidad laboral en Estados Unidos, ya que aumentan costos para los fabricantes y reducen la demanda de vehìculos.
Por su parte Rene Mendoza, Presidente Nacional de la Cadena de Proveedores de la Industria en México CAPIM, manifestó que aún con los anuncios de los posibles aranceles por parte de Estados Unidos los impactos positivos de las nuevas inversiones producto del nearshoring seguían su proceso normal e inclusive las oportunidades de negocio para proveedores nacionales en la industria de manufactura se habían incrementado un 214 por ciento en enero del 2025 comparado con el mismo mes de 2024.
“El 49 por ciento de las nuevas inversiones anunciadas en los últimos tres años pertenecen al sector de manufactura y un porcentaje muy alto al sector de la industria automotriz. Las inversiones en el sector industrial llevan un proceso de alrededor de 18 a 24 meses después de su anuncio para iniciar sus impactos en la cadena de proveedores ya que es el tiempo en que una empresa grande empieza a operar, de tal manera que actualmente estamos sintiendo los efectos positivos de los inicios de operación de estas nuevas inversiones”, comentó Mendoza.
CAPIM mencionó que sólo en el mes de enero pasado, 31 empresas con nuevas inversiones fueron vinculadas con 266 nuevos proveedores nacionales del sector automotriz para una vinculación de negocios superior a los 2,003 millones de dólares.
Ambas instituciones coincidieron que la estrategia del Gobierno Federal de acelerar la implementación del Plan México como medida al fortalecimiento del desarrollo económico del país era fundamental y para apoyar en esta implementación.