Una coalición de empresas automotrices en Estados Unidos hizo llegar una carta a los funcionarios del presidente de ese país, Donald Trump, en la que lo instó a no imponer aranceles del 25 por ciento a las autopartes importadas, advirtiendo que se reducirían la venta de vehículos y aumentarían los precios.
Según un despacho informativo de la agencia Reuters, el grupo de empresas señaló que “los aranceles a las autopartes perturbará la cadena mundial de suministro automotriz y desencadenarán un efecto dominó que conducirá a precios más altos de los automóviles para los consumidores, menores ventas en los concesionarios y hará que el mantenimiento y la reparación de los vehículos sean más costosos y menos predecibles”.
Y es que Donald Trump dijo que planea imponer aranceles del 25 por ciento a las autopartes a más tardar a partir del próximo 3 de mayo.
La carta de los grupos que representan a General Motors, Toyota Motor, Volkswagen, Hyundai y otros, fue dirigida al representante comercial de Estados Unidos, Jamieson Greer, al Secretario de Comercio, Howard Lutnick y al secretario del Tesoro, Scott Bessent.
Las agencias gubernamentales no hicieron comentarios de inmediato.
La carta fue firmada por la Alianza para la Innovación Automotriz, el grupo comercial que representa a casi todos los principales fabricantes de automóviles, el Consejo Americano de Política Automotriz, que representa a los tres fabricantes de Detroit, la Asociación Nacional Nacional de Concesionarios de Automóviles, así como MEMA, también conocida como la Asociación de Proveedores de Vehículos, y otros.
“La mayoría de los proveedores de automóviles no están preparados para una interrupción abrupta inducida por aranceles. Muchos ya están en dificultades y se enfrentarán a paros de producción, despidos y quiebra”, añade la carta, señalando que “basta con el fracaso de un proveedor para provocar el cierre de la línea de producción de un fabricante de automóviles”.
El 14 de abril, Trump declaró que estaba considerando modificar los aranceles del 25 por ciento impuestos a las importaciones de automóviles y autopartes de México, Canadá y otros países. Trump afirmó que las compañías automotrices “necesitan un poco de tiempo porque van a fabricar sus productos aquí”.
